sábado, 12 de enero de 2008

MENTIROSOS SEGUNDA PARTE


Hace unas semanas hablaba de las mentiras y de los mentirosos y cada vez me sorprendo mas. Es seguro que el mentiroso utiliza las mentiras para su provecho o porque tiene complejos y no quiere que estos salgan a flote. Y bueno estudiosos del tema dicen que la mentira existe desde siempre y que la humanidad necesita de ellas y rubrican que si todo el mundo dijera la verdad seria caótico, y quien dice que no miente esta mintiendo.

Lo que me he dado cuenta es que hay mentirosos que usan la mentira para que los demás oigan lo que quieren oir y aquellos que la necesitan para autoconvencerse de las cosas.

De estos he conocido a muchos que se sienten los perfectos porque han creado un mundo de mentiras que así lo acredita. Aunque hagan daño a las personas se autoconvencen de que son los demás los equivocados y los que han hecho las cosas mal. Nunca son culpables de nada, son siempre los demás los que no han hecho las cosas que debieran y los que son malvados porque si.

Debe ser genial el vivir en ese continuo engaño, poder sentirse siempre por encima del bien y del mal, ser los seres mas perfectos de la creación. Cuando algo va mal o algo no saben hacer o cosas similares crean en torno a ellos mil detalles que les salvan del fracaso.

Son seres perfectos porque son siempre los que aman y los demás son los que les profesan odio o les engañan. Es curioso que para estos mentirosos profesionales son los demás los que mienten o no dicen toda la verdad, o siempre están equivocados. Las discusiones con ellos son imposibles pues pueden inventar cualquier excusa o cualquier motivación. Son los demás los que provocan las cosas y ellos solo se defienden o se dejan llevar. Nunca engañan a nadie y si lo hacen es porque sufrieron el acoso del otro y no tuvieron mas remedio que hacer daño por ese motivo. Con lo cual nunca hieren porque si, sino como consecuencia de heridas anteriores.

Y así sucesivamente, pueden conseguir ser las personas perfectas e idóneas y cualquier cosa imperfecta que hagan ha sido como consecuencia de los demás. Y lo peor es que al final se lo creen y quieren hacérselo creer al resto del mundo con todos los medios posibles. Pero algunos ya no nos creemos nada porque sabemos de que pie cojean.

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