Unos días en Madrid y el Escorial para salir de la rutina han servido para reafirmarme en que Zaragoza es una ciudad ideal para vivir. Siempre me quejo del transporte en Zaragoza aunque siempre me desplazo andando pero en Madrid es algo terrorífico enfrentarte a un metro saturado. Se incendión un vagón, hubo problemas en otra linea, se atascaba el billete... se siente uno agobiado por la gente o tienes que soportar canciones que no deseas a todo volumen.
Las calles saturadas, los bares carísimos, todo bastante sucio... todo repleto o todo vacío.
También es verdad que en Madrid están todos los espectáculos que merecen la pena, tanto en teatro como musicales.
Vi el cambio de la guardia del palacio Real, muy mal organizado, tenemos que aprender mucho de los ingleses si queremos convertirlo en un evento turístico.
Buena comida y barata, más barata que en Zaragoza, en contraste con los dos euros de un café en muchos sitios.
El Escorial como siempre, un pueblo tranquilo y turístico, que vive gracias a tener ese bello edificio, donde están enterrados los reyes, reinas e infantes españoles.
Estos días intentaré hacer unos videos con las fotografías que hice y los colgare en el blog.
Eso sí: nunca viviría en Madrid.
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